Donde hay que poner el foco inversor de cara al próximo semestre

Foto: Indicador Ibex 35. (EFE/Ana Bornay)

Fuente de la imagen: El Confidencial

Fecha de publicación: 10 de mayo de 2023

La mayoría de la gente que no entiende los mercados es porque no entiende las reglas de los mercados. Y la más importante es que miran siempre al futuro. Técnicamente hablando, descuentan en los precios actuales expectativas de evolución futura de la economía, las finanzas o de los resultados empresariales.

De hecho, los «Masters» especializados en mercados financieros, deberían de empezar con ese refrán que dice «agua pasada no mueve molino».

Alguien dirá que el futuro no se conoce y por lo tanto no se puede trabajar en base a expectativas. Para empezar, expectativa no significa certeza. Hablamos de detectar cuáles son las expectativas del mercado y aprovecharlas, no que necesariamente se cumplan. Aunque, todo hay que decirlo, suelen cumplirse a menudo. En cualquier caso, para quien no lo entienda, tenemos otro refrán: «compra con el rumor, vende con la noticia», que podríamos sustituir por «compra con la expectativa, vende – o mantén – con la confirmación«

¿Quieren un ejemplo muy sencillo y muy reciente? Vean como han ido bajando los tipos de interés de los bonos de largo plazo en el mercado – y como ha subido su precio – adelantándose a la bajada de la inflación y a la «pausa» recientemente anunciada por la Fed.

De lo que se trata es de analizar tendencias en base a la información disponible actualmente y, por supuesto, también del pasado. No se tiene la bola de cristal, se tiene INFORMACION. Y lo pongo en mayúsculas, porque, cuandose tiene buena información sobre cuál es la tendencia y se sabe interpretar correctamente, se pueden establecer tendencias con mayor probabilidad de ocurrencia.

De cara al próximo semestre, la situación es enormemente sencilla o enormemente complicada, según se mire. Es enormemente sencilla porque, si finalmente se confirma el «cambio de pantalla» por el cual la inflación sigue bajando en lugar de subir, ocurrirá algo tan sencillo como que cuando cambia el escenario cambia la tendencia.

Si el año pasado el mercado cayó porque aumentó la inflación y eso obligó a la Reserva Federal a subir los tipos de interés, si en el próximo semestre la inflación siguiera bajando y, sobre todo, si acompaña la subyacente, el mercado hará justo lo contrario que hizo el año pasado.

¿Les parece demasiado simple? Pues ya verán lo que ocurre si al final se consigue meter a la inflación en vereda, es decir, que se confirme el descenso (no, no es necesario que llegue al 2 % para que los mercados empiecen a descontar futuras bajadas de tipos). Y por supuesto, también es válido lo contrario. Como dijo un presidente de la Reserva Federal: «la inflación es como la pasta de dientes: muy fácil de sacar del tubo, muy difícil de volverla a meter«.

No es bola de cristal. Más que con la magia debe compararse con la física. Es el principio de acción y reacción, de los vasos comunicantes o cualquier otro principio físico comparable. Es subirse al cambio de escenario según se va confirmando el cambio. Si las probabilidades de cambio son muy altas, conviene ser de los primeros. Si no lo son tanto, mejor ser el segundo o el tercero.

Los ganadores del próximo semestre serán los inversores o los asesores financieros que sepan leer adecuadamente los indicadores que afecten a la inflación futura. No es magia, es información y estrategia. Tampoco los militares saben exactamente cómo se va a desarrollar una batalla y, aún así, los buenos generales ganan muchas más batallas que las que pierden.

La primera cuestión es tener claro que hará la inflación en EEUU, porque así sabremos qué es lo que hará la Reserva Federal, que ha sido, es y será siempre el factor más importante en los mercados financieros.

Luego viene el ajuste fino: los activos, sectores y países que pueden aportar el plus de rentabilidad. Ahí también existen reglas propias de los mercados. Como dijo Keynes, los mercados son como un concurso de belleza: no gana la más guapa, sino la que más votos tiene. Para los que no lo hayan «pillado»: puede que a nosotros una o un concursante nos parezca la más atractiva o el más atractivo del concurso, pero luego resulte que a la mayoría del jurado le llame más la atención otra persona. Y el jurado aquí es el mercado y sus preferencias.Hay que coordinar nuestras preferencias con las que veamos que pueden ganar peso en el mercado.

La primera cuestión es tener claro que hará la inflación en EEUU

Abundando en lo anterior, Keynes también dijo que el mercado se mueve mucho por modas. Menos mal que lo dijo Keynes, porque si lo dijera yo me caería la del pulpo. Pero es totalmente cierto: con mayor o menor fundamento, hay activos, sectores y países que se ponen de moda y acaban ganando. Y cuidado: no tienen porque ser los que se ponen de moda en los medios o las redes sociales, sino los que de verdad acaban comprando mayoritariamente los inversores. De hecho, suelen ser cosas muy diferentes. Esto es como lo de la opinión pública y la opinión publicada: no tienen porque coincidir.

Luego está el ajuste «finísimo», que muchas veces es tan importante como el ajuste fino, aunque menos que acertar en la sintonización fundamental, que sería lo que haga la reserva federal o que se produzca algún evento económico o geopolítico muy importante.

Para entender lo del ajuste «finísimo», pongamos un ejemplo de gran actualidad: la inteligencia artificial. Sin duda es un tema de moda, y si el binomio inflación / Reserva Federal no lo estropean, es un tema con mucho fundamento como idea de inversión. Ahora bien ¿cuál es la forma de aprovecharlo? En principio no nos vale un fondo indexado al SP 500 o algo así, ya que, aunque la mayoría de los sectores y empresas se vayan a beneficiar de esto que nosotros llamamos la versión 4.0 de la revolución digital, sin duda habrá enormes diferencias. Por lo tanto desde el punto de vista de los fondos de inversión qué duda cabe que necesitaremos localizar un gestor que haya entendido bien qué empresas sacarán mayor partido de la IA, es decir, fondos de gestión activa.

Otra opción es utilizar un ETF centrado en la inteligencia artificial, pero hay que tener cuidado, porque los que se venden en España dejan mucho que desear. También se puede ir directamente a buscar empresas pequeñas que vayan a ser adquiridas por empresas más grandes por una millonada, pero no es tan fácil dar con ellas, hace falta muy buena información al respecto. Las modas hay que aprovecharlas, pero hay que evitar que te vendan un vaquero acampanado cuando lo que está de moda son los «pitillo».

Articulo escrito por nuestro Director de Estrategia, Victor Alvargonzález, en El Español: Donde hay que poner el foco inversor de cara al próximo semestre