Algo falla en la explicación de los analistas

En la mayoría de las ocasiones se puede identificar claramente qué hay detrás de una corrección, pero en otras, como sucede en la actualidad, la única explicación es que el mercado espera información que le permita tomar una dirección.

La explicación “oficial” de los movimientos laterales de las últimas semanas es que los inversores están muy preocupados con la inflación. Una inflación que no se sabe si es “buena” o “mala”. Pero si la preocupación fuera la inflación, debería notarse mucho más en Estados Unidos, donde se espera un crecimiento muy superior al de Europa.

Otro indicador que pone en duda que el “impasse” en el que se encuentran las bolsas se deba al temor a un fuerte repunte de la inflación en el medio y largo plazo son los tipos de interés de los bonos, que señalan un repunte de la inflación, no un descontrol tipo años 70.

El mercado es consciente de que estamos ante el cuello de botella que se forma cuando, tras un confinamiento global, la economía vuelve a la vida y se produce un desequilibrio entre la oferta y la demanda. La inflación que vamos a tener a medio plazo, que es el dato que realmente nos interesa, dependerá de cuanto tarde en equilibrarse la oferta y la demanda. Tal vez más que por temor a la inflación, la indefinición actual del mercado se deba a la simple duda de si estamos ante un cuello de botella o si la “Gran Rotación” será también “la Gran inflación”.

Leer Artículo Completo

Fuente de la imagen: El Economista