Variantes contra vacunas, el nuevo paraíso del «trader»

El Confi 30 11

Fuente de la imagen: El Confidencial

 

Artículo publicado en El Confidencial

 

Resumen  artículo

 

Con Donald Trump en el poder el mercado se convirtió en un paraíso para el operador de corto plazo, el “trader”. Un día China era el imperio del mal y el mercado se desplomaba, que es cuando aprovechaba el “trader” para comprar barato. Otro declaraba que el presidente Xi era un tipo estupendo, el mercado subía y el “trader” realizaba beneficios.

Ahora los aliados del “trader” son las variantes del Covid. Los inversores empezamos a conocer su “modus operandi” y, enfrente, la capacidad de las farmacéuticas para neutralizarlas. Ahora sabemos que la ciencia está capacitada para crear vacunas efectivas. Y sabemos algo importante: los plazos. En un par de semanas sabremos que, en el peor de los casos, en unos meses estaremos en la situación en la que estábamos justo antes de llegar Omicron.

Con esta información se pueden hacer muchas cosas. Invertir ya y cruzar los dedos para que las vacunas actuales funcionen, o que los cambios necesarios sean sencillos de implementar, pero, en mi opinión, hay una forma mejor de hacerlo sin jugárselo todo a cara o cruz.

El término medio es esperar a conocer datos sobre cómo se va desarrollando la enfermedad en los contagiados. Especialmente ver qué ocurre con los vacunados. Tendremos mucha información sobre esto y sobre avances de las farmacéuticas en su análisis de la efectividad de las vacunas.

Mi sugerencia para el trader es el clásico “comprar con el rumor, vender con la noticia”, siempre que los rumores apunten a que no se trata de una variante más dañina, o que las vacunas no están tan obsoletas como descuenta actualmente el mercado. Esto no es algo que recomiende a nuestros clientes, ya que nuestra especialidad no es el corto plazo, sino el medio y el largo plazo. La forma de actuar del inversor que mira a medio y largo sería diferente.

En caso de que la balanza se incline hacia que las vacunas mantienen eficacia y que la enfermedad no esta tan dañina como para llenar los hospitales, lo mejor para el inversor que ya tiene posiciones es no hacer nada y esperar la vuelta de la tendencia alcista. Pero si la balanza se inclina hacia el peor de los escenarios (necesidad de una vacuna que tarde meses), que invierta una vez se produzca la correspondiente caída bursátil, ya que será como invertir sabiendo cuál será la situación de los mercados dentro de unos meses.

Tan pronto haya una vacuna y pasados los confinamientos, la gente volverá a consumir, como confirmaban recientemente las fuertes cifras de consumo que hemos visto en Norteamérica, Reino Unido y en menos medida, la Eurozona. Habrá periodos de fuerte crecimiento (cuando nos dejen salir del correspondiente confinamiento) y otros económicamente recesivos (cuando nos confinen y haya que esperar a una nueva actualización de la vacuna). La pura definición del ciclo económico, pero con fechas concretas: las que marquen el tiempo que se tarda en crear, fabricar y distribuir las vacunas actualizadas.

Para los inversores que ya estaban en mercado, en el peor escenario habrá un receso en el crecimiento económico y habrá que tomar medidas para ajustar la cartera y que no sufra demasiado en el periodo de ajuste. Pero, en general, las posiciones que eran ganadoras hasta hace unos días volverán a serlo cuando se sepa que hay una vacuna. Para que suban las bolsas y bajen los bonos no será necesario que la vacuna esté en los ambulatorios: al mercado le bastará con saber que estará. Es lo que ocurrió en noviembre de 2020.

 

Artículo escrito por nuestro Director de Estrategia, Víctor Alvargonzález, en El Confidencial.