Qué es un PIAS y cómo funciona de verdad

En el mercado hay infinidad de productos de ahorro e inversión. Uno de los que más ha crecido en los últimos años son los PIAS o Plan Individual de Ahorro Sistemático.
Si has acudido a tu banco en busca de consejo o te has topado con algún planificador financiero (ojo, que no asesor), es fácil que te lo hayan recomendado como alternativa de ahorro para la jubilación.
También es fácil que no hayas entendido en qué consistía en realidad o de qué producto se trataba. En este artículo vamos a ponerle remedio y explicar qué es un PIAS, cómo funciona, sus ventajas y desventajas y si tiene sentido incluirlo o no dentro de tu cartera de inversiones.

¿Qué es un PIAS?

Un PIAS es en realidad un seguro. En concreto, un seguro de vida-ahorro normalmente enfocado a crear una renta que complemente la pensión pública. Es decir, se trata de
productos financieros para el largo plazo.
Al firmar un plan individual de ahorro sistemático lo que estás firmando es un seguro de vida que está enfocado al ahorro y la inversión.
La traducción práctica es que el producto que has contratado es un seguro y, como todo seguro, una parte de tu dinero se destinará al pago de una prima, en este caso como seguro
de vida. La parte positiva es que tus seres queridos cobrarán un capital adicional a tu inversión en caso de fallecimiento (eso sí, la cantidad suele ser limitada, casi nunca superior a los 600 €). La parte
negativa es que no se invierte todo tu dinero, solo una parte. Además, en función de cómo se estructuren los costes, puedes pagar casi la totalidad de la prima y los costes durante los primeros años.

Cómo funcionan los PIAS

En concepto un PIAS es similar a un Hedge Fund (fondos de fondos) o un unit linked (otro producto asegurador).
En realidad, un PIAS es una carcasa que dentro tiene diferentes productos de inversión, normalmente un unit linked con diferentes cestas de fondos de inversión. De esta forma, en realidad estás invirtiendo en un conjunto de fondos de inversión u otros activos como renta fija, solo que utilizando el PIAS como vehículo de inversión.
¿Y por qué se usa un PIAS y no un hedge fund o una cartera de fondos? Básicamente porque las compañías aseguradoras, que son quienes comercializan PIAS, no pueden ofertar directamente carteras de fondos gestionadas.
Además, el PIAS tiene otras características específicas, como la posibilidad de cargar las aportaciones mensuales a la cartera como un recibo más, algo que no puede hacer un fondo de inversión ni una cartera de fondos o un unit linked (por eso se comercializan unit linked en formato PIAS).

Con esto claro, el funcionamiento de un PIAS es sencillo. Normalmente trabajan con un aportación inicial más una serie de aportaciones fijas anuales o mensuales.

Como ahorrador irás destinando al PIAS un dinero que crecerá o no en función de dónde y cómo invierta el PIAS. Y es que debes tener claro que los PIAS no son un producto garantizado salvo los que así lo indique.

Algunas aseguradoras irán sumando bonificaciones como incentivo según vayas sumando años con el PIAS.

Características de los PIAS

Los PIAS son un producto complejo, como la mayoría del sector asegurador. La complejidad en este caso viene dada por su estructura de costes y la falta de transparencia en algunos casos.

Las cualidades más importantes de este producto son:

• Liquidez. Vas a poder recuperar el dinero en cualquier momento, aunque pueden existir penalizaciones en función de la estructura de costes del PIAS. Hay PIAS que cargan todos los gastos al principio, de manera que no te compensará recuperar el dinero hasta años después o, si lo haces, lo harás con pérdidas.
• Flexibilidad en el cobro. Tú decides cuándos quieres cobrar el dinero, no debes esperar a una fecha concreta. Eso sí, si quieres recuperar el capital en forma de renta vitalicia deberán pasar por lo menos 5 años desde la primera aportación.
• Cuentas con un seguro de vida adicional, ya que los PIAS no dejan de ser pólizas de seguro.
• Regulación. Los PIAS están supervisados por la Dirección General de Fondos de Pensiones y Seguros (DGFPS).
• Límites. La cantidad máxima que puedes invertir en un PIAS es de 8.000 euros al año y 240.000 euros en total.
• Comisiones y costes. Los PIAS tienen una estructura de costes algo más compleja que la de una cartera de fondos. Como con cualquier producto gestionado, el PIAS cobra su propia comisión de gestión, a la que suma también los costes y comisiones de los fondos en los que invierte. A esto se añaden los gastos y costes de la prima, que no se consideran gastos de gestión.
• Fiscalidad. Los rendimientos del PIAS tributan en la renta, aunque más adelante explicaremos específicamente como porque es una de sus supuestas ventajas, aunque en realidad no lo es tanto ni es diferente a lo que puedes hacer con un fondo de inversión.
• Aportaciones periódicas. Permite programar las aportaciones que vas a realizar cada mes y que después la aseguradora se encargue de enviar un recibo para cobrarlas sin que tú tengas que hacer nada más.

Otra forma de ver las principales características de los PIAS es a través de sus ventajas y desventajas.

Ventajas de los PIAS

Los puntos positivos de este producto son:

• Puedes retirar tu dinero cuando quieras.
• Permite automatizar el ahorro y la inversión con aportaciones sistemáticas.
• Tienen límites de entrada muy asequibles (permiten invertir desde 50 euros).
• No permite realizar cargos ni asociar tarjetas, como la mayoría de productos financieros.
• Gestión profesional. Detrás de los PIAS hay un equipo de gestores que elige qué fondos componen la cesta de inversión y sus pesos en cada momento.

Desventajas de los PIAS

Los puntos negativos de los PIAS son:

• Comisiones y gastos elevados frente a otras opciones. En total pueden superar el 4%.
• Penalizaciones en caso de retirar tu capital antes de un plazo.
• Pago de costes y comisiones durante los primeros años en el caso de los PIAS de largo plazo.
• La mayoría no utilizan clases limpias de fondos ni clases institucionales. Esto aumenta los costes, reduce la rentabilidad. Además, al cobrar retrocesiones los gestores del PIAS, se introducen incentivos perversos a la hora de que el gestor elija la composición de la cartera.
• Falta de transparencia a la hora de informar de costes e incluso de rentabilidades.
• Dificultad para comparar productos, ya que no existen portales como Morningstar que reúnan información sobre los PIAS.
• En los PIAS garantizados, lo que se garantiza es un interés técnico, no el interés nominal que figura en el folleto.

¿Qué rentabilidad tiene un PIAS?

La rentabilidad de los PIAS depende del tipo de seguro de ahorro. Los hay que invierten en renta fija y son más conservadores y los hay que invierten en renta variable tienen un mayor potencial de ahorro.

Además, esa rentabilidad es uno de los misterios y secretos mejor guardados. Primero, porque no todas las compañías comparten sus datos. Segundo, porque no hay ningún lugar que centralice esa información.

Para averiguarla tendrás que entrar en la ficha de cada uno de los PIAS que te interese y buscar el dato.

¿Cómo tributan los PIAS?

La fiscalidad es una de las ventajas de los PIAS, por lo menos en teoría y siempre según quienes comercializan este producto. La clave para saber si es verdad o mito es saber cómo tributan los PIAS.

Lo primero que debes saber es que las aportaciones a los PIAS no desgravan. Eso solo lo hacen las inversiones en planes de pensiones y en PPAs o Planes de Previsión Asegurados (la versión del sector asegurador de los planes de pensiones).

A partir de ahí, con los PIAS puedes escoger recuperar el dinero de golpe o constituir con él una renta vitalicia. El renta supuesto beneficio fiscal de los PIAS radica en la segunda opción, así que empezaremos por ahí.

Rescate como renta vitalicia

El dinero en un PIAS se puede recuperar como una renta vitalicia. Las rentas vitalicias son un seguro que básicamente extiende una cantidad dada de dinero hasta el fallecimiento. Es decir, pones un capital de partida y te aseguras que cobrarás una pequeña renta toda la vida. La aseguradora se encarga de hacer los cálculos para determinar la cantidad, que normalmente será limitada.

Estas rentas vitalicias sí que disfrutan de ventajas fiscales en forma de reducción sobre la renta obtenida. Esto quiere decir que al hacer la renta no se tendrá en cuenta todo el capital que has ingresado, solo una parte.

Esta reducción aumenta según la edad. Cuanto más tardes en recuperar el PIAS y crear la renta vitalicia, menos impuestos pagarás. La escala que sigue es la siguiente.

• Menos de 40 años, tributarás por el 40% de la renta obtenida. Con un tipo del ahorro del 19%, el tipo efectivo de tributación es del 7,6%.
• Entre 40 y 49 años, se tributa por el 35% de la renta obtenida (tipo efectivo: 6,65%).
• Entre 50 y 59 años, se tributa por el 28% de la renta obtenida (tipo efectivo: 5,32%).
• Entre 60 y 65 años, se tributa por el 24% de la renta obtenida (tipo efectivo: 4,56%).
• Entre 66 y 69 años, se tributa por el 20% de la renta obtenida (tipo efectivo: 3,8%).
• A partir de 70 años, se tributa por el 8% de la renta obtenida (tipo efectivo: 1,52%).

El “truco” de esta ventaja es que cualquier ganancia o pérdida patrimonial se puede constituir en una renta vitalicia. Dicho de otra forma, si quieres, puedes transformar las ganancias de tu cartera de fondos de inversión en una renta vitalicia y tendrán el mismo tratamiento fiscal en lugar del que les correspondería como fondo de inversión.

En otras palabras, es una ventaja más bien universal e intrínseca a la mayoría de productos de inversión.

Además, esta renta vitalicia tampoco es gratuita. Como todo seguro tiene sus costes que hay que valorar.

 Rescate sin renta vitalicia

¿Cómo tributa un PIAS si no lo recuperas como renta vitalicia? En ese caso se le aplicará la fiscalidad que a cualquier otro seguro de ahorro y tributará en la renta como un rendimiento de capital mobiliario por el total de capital que rescates.

Los rendimientos del capital mobiliario tributan dentro de las rentas del ahorro según la siguiente escala:

• Beneficios hasta 6.000 euros – tipo del 19%.
• Beneficios entre 6.000 y 50.000 euros – tipo del 21%.
• Beneficios entre 50.000 y 200.000 euros – tipo del 23%.
• Beneficios de más de 200.000 euros – tipo del 27%.

¿Son los PIAS un buen producto?

Como toda inversión, los PIAS tienen su público. Pueden ser una alternativa para quienes buscan la sencillez de automatizar todo el proceso de ahorro e inversión o para quienes no disponen de mucho dinero de partida, pero sí tienen cierta capacidad de ahorro. A fin de cuentas, permiten invertir desde 50 euros.

Para el resto de casos, una cartera de fondos de inversión puede ofrecer mejores prestaciones y el mismo acceso a gestión profesional. Por ejemplo, con Nextep tendrás un equipo de profesionales dedicado a crear tu cartera de inversión e incluso gestionarlo todo si es lo que quieres.

Además, tendrás la ventaja de acceder a clases limpias de fondos, más baratas y donde no existen conflictos de intereses. En definitiva, un asesoramiento más independiente. A esto se añade la rentabilidad adicional del ahorro de costes a largo plazo.