La revolución del metaverso comienza con fusiones y adquisiciones

Resumen  artículo

Algunos piensan que el metaverso es sólo humo. Otros pensamos que es la tercera fase de la revolución digital. Sea una cosa o la otra, lo que está claro es que va a ser una fuente de rentabilidad para los inversores que sepan aprovecharlo. Y, en esta primera fase, lo va a ser por la vía de las operaciones corporativas.

Hace semanas recomendamos aprovechar la corrección del sector tecnológico para darle una vuelta a las carteras, orientando la inversión en tecnología hacia los movimientos corporativos que las grandes empresas van a hacer para posicionarse en el metaverso comprando empresas pequeñas pero que tienen la tecnología puntera que necesitan las grandes. Hay que aprovechar la corrección para comprar barato y, segunda cuestión, hacerlo añadiendo ETFs a la cartera de fondos tradicionales.

Los fondos tradicionales no tienen exposición a las pequeñas y medianas empresas que comprarán las grandes para posicionarse en el metaverso. Y a nosotros nos interesa tener posiciones en las empresas que puedan ser compradas. Y en empresas similares, ya que cuando se paga mucho por una empresa se actualiza automáticamente la valoración de todo el sector.

Todo son ventajas en los ETF: precio, operativa y liquidez. El único inconveniente es el tratamiento fiscal, que no es poco, al no tener la ventaja del traspaso libre de impuestos de los fondos tradicionales. A los ETF en España se les ha puesto una barrera de entrada porque son mucho más baratos,, algo que asusta a los bancos, sociedades de valores, agencias de valores y asesores NO independientes, cuyos ingresos dependen de las abultadas comisiones que les pagan los fondos de inversión tradicionales.

A pesar de ello, en España hay ya muchas plataformas de primer nivel que ofrecen operativa de ETFs a precios razonables. Además, la fiscalidad no debería ser el motivo para dejar de hacer un buen negocio. Cuando empezaron, empresas como Microsoft, Apple, Amazon o Facebook no se podían comprar a través de fondos de inversión pero es cuando estaban más baratas.

Hablando de comprar directamente acciones para beneficiarse del proceso de adquisiciones que está generando el metaverso, no se lo recomendamos salvo que cuente con un asesoramiento muy cualificado que conozca bien este nuevo sector. La mejor opción es utilizar una cesta de valores creada por alguien especializado y cualificado para seleccionar los valores que formarán parte de la cesta, que es exactamente la definición de un ETF.

Es cierto que con lo limitada que es la oferta de ETF en España podemos querer invertir en tecnologías relacionadas con el metaverso y que nos “coloquen” en el ETF algunas posiciones en otro tipo de valores donde no esté tan clara dicha relación. Pero siempre es mejor tener algunas posiciones en esta revolución que no tener ninguna, que es lo que le “ofrecen” los fondos tradicionales relación con la tercera fase de la revolución digital.