Probabilidades de que se confirme un cambio de tendencia

Salvo que ocurra algo realmente inesperado —y en esta época que nos ha tocado vivir no sería extraño—, nuestra afirmación del cuaderno anterior diciendo que el mercado tocó fondo en octubre se puede dar por cumplida.

Ahora la cuestión es si lo siguiente será un mercado lateral o si tendremos un cambio de tendencia al alza. Por supuesto el mercado también puede bajar, pero nuestra afirmación es que no bajaría por debajo de los mínimos de octubre, no que no pueda tener correcciones.

Y como dijimos en el caso del suelo del mercado, no se trata de tener una bola de cristal, sino de hacer un buen cálculo de probabilidades en función de la información disponible, que es como se trabaja en los mercados. Así que vamos a analizar brevemente los factores necesarios para que se produzca un cambio de tendencia al alza y las probabilidades aproximadas de cada uno de ellos.

Aclaremos que centramos nuestro análisis en el mercado norteamericano porque es el que marca la dirección de todos los demás, tal y como ha ocurrido con el suelo de las bolsas. Ha sido Wall Street quien ha establecido el de todas y será Wall Street quien marque la próxima tendencia.

 La inflación

Al igual que con el suelo del mercado, la clave para un cambio de tendencia está en la evolución de la inflación en EE. UU.

Si sigue bajando, tendremos la gasolina que necesita el mercado para retomar la tendencia alcista. Al igual que el repunte de la inflación obligó a la Reserva Federal a subir agresivamente los tipos de interés, si siguiera bajando, la Reserva Federal detendría el proceso de subida de tipos. E incluso el mercado empezaría a pensar en futuras bajadas. Por las mismas, si la inflación se mantuviera estable o le costara mucho bajar, especialmente a la inflación subyacente, lo más probable es que fuéramos a un mercado lateral.

Como hemos comentado en otros cuadernos —y ampliamos en este—, le damos una probabilidad alta a que la inflación siga cayendo. Nos queda la duda de si podría sorprendernos bajando mucho y rápido (ver último capítulo de este cuaderno) o si simplemente seguirá bajando lentamente como hasta ahora. En cualquier caso, trabajamos con la hipótesis de que bajará.

 El análisis técnico

Insistimos siempre en que el análisis fundamental y el técnico no solo no son incompatibles, sino que son complementarios. Y, en nuestra opinión, no se deben tomar decisiones de inversión si no se cumplen las condiciones necesarias en ambos casos.

La clave para un cambio de tendencia desde el punto de vista del análisis fundamental (de los elementos fundamentales desde el punto de vista económico y financiero) es la inflación. Pero desde un punto de vista técnico es la ruptura de la línea de tendencia bajista que todavía está en vigor (línea roja del gráfico n.º 1), pese a la fuerte recuperación que han tenido las bolsas recientemente.

Esta línea ya se ha roto en el caso del Dow Jones —de lo que se han beneficiado los clientes de Nextep, donde muchos de los fondos recomendados siguen más a este índice que al SP 500—, al igual que en otros sectores recomendados en nuestras carteras, pero a la hora de redactar este informe todavía no se ha roto en el SP 500 (tal y como podemos comprobar en el gráfico n.º 1).

 

Gráfico nº 1: La tendencia bajista del SP 500 sigue en vigor, pero cerca de la ruptura al alza.

Captura de Pantalla 2022 12 09 a las 14.21.00

La que acaba de tocarse, aunque de momento sin romperse de forma concluyente, es la media móvil de las últimas 200 sesiones (línea roja del gráfico n.º 2), otro indicador técnico muy importante.

Necesitaremos que se rompan ambas, la línea de tendencia y la media móvil de medio plazo, para que el análisis técnico nos dé una señal clara para sobreponderar la renta variable en las carteras.

 

Gráfico nº 2: Media móvil de las últimas 200 sesiones a punto de romperse al alza

Captura de Pantalla 2022 12 09 a las 14.19.47

Conclusiones

Las probabilidades de que hayamos entrado en un cambio de tendencia son altas, pero no podremos afirmarlo hasta que se rompa al alza la línea de tendencia bajista que se inició a comienzos del año en curso.

Los inversores tienen que estar preparados. Han de contar con el asesoramiento o el servicio de gestión adecuado. Porque todo el mercado está esperando a ver si se rompe dicha línea de tendencia para volver a la renta variable.

No solo deben estar preparados: tienen que tener posiciones en renta variable, para no perderse la parte más importante de una eventual subida. Si la línea de tendencia bajista se rompiera al alza, el grueso de la subida se produciría en los días inmediatos al evento.