Le está regalando dinero a bancos y sociedades de valores

 

le esta regalando dinero a bancos y sociedades de valores

 

Leer artículo completo

 

Resumen  artículo

Los españoles que invierten con fondos de inversión pagan las comisiones más altas del mundo. Y no tendrían porqué. Hay bancos y sociedades de valores que cobran comisiones competitivas. No como en EEUU, pero sí como en otros países europeos.

Todo lo que se pague por encima del precio del mercado es regalar dinero. Como si decidiese comprar un coche y eligiese un concesionario que le cobra un 70% más que otro por comprar el mismo vehículo. Eso es exactamente lo que uno hace cuando compra un fondo en un banco o sociedad de valores con las comisiones más caras. Además, irónicamente la mayor parte de la comisión de gestión no se la lleva el gestor del fondo, sino el vendedor, que es quien menos valor le aporta.

Las plataformas que cobran menos comisiones deberían ser las que ganen más cuota de mercado, ya que si crecen el resto tendrá que bajar precios. Como ha ocurrido en el resto del mundo. Pero vayamos con los consejos para pagar un precio justo.

El primero para invertir en los mercados más importantes utilice fondos indexados. Es lo que hacen el 50% de los inversores norteamericanos y el 20% de los europeos. No pague comisión de gestión activa por productos que se limitan a seguir a un índice. Es algo evidente, pero aún así el 90 % de los inversores sigue cometiendo el mismo error. Ojo, no hablo de carteras gestionadas compuestas por fondos indexados, porque entonces la duplicidad de comisiones elimina cualquier ahorro.

Evidentemente hay fondos de gestión activa que superan, incluso frecuentemente, a los índices. En ese caso, olvídese del consejo anterior. Pero intente comprar las llamadas “clases limpias”, mucho más baratas. Aunque muchas entidades no permiten a sus clientes usarlas sin firmar un contrato de gestión de cartera -y se acabó el ahorro-, si supera el millón de euros puede que negocien. Y si supera los tres, seguro que se avienen a negociar.

Aunque solo pasa en España, tiene gracia que sea en el centro del capitalismo, el sector financiero, donde menos se aplica algo tan básico para el comercio como el “rappel” sobre ventas (descuento por volumen).

También se debe recordar que los asesores financieros independientes que cumplen como tales tienen como misión no sólo la rentabilidad, sino también reducir las comisiones de sus clientes. Hay formas de hacerlo, sólo hay que encontrar las lagunas que hay en el oligopolio español.

En el caso de que alguien no quiera cambiar de banco, el asesor puede recomendar los fondos con comisiones más baratas de las entidades con las que trabaje el cliente. No es lo mismo, pero ayuda, sobre todo en altos patrimonios, que tienen acceso a clases más baratas.

Ahorrar un 1% anual en comisiones – ahorro que se puede conseguir de media – buscando esas “lagunas” supone bastante dinero, especialmente en el largo plazo, pero sobre todo es una cuestión de principios. El dinero cuesta mucho ganarlo y puestos a regalar el dinero, hay mejores maneras de hacerlo. Ahí tiene a sus hijos, sus nietos o una ONG de su confianza.

Artículo escrito por nuestro Director de Estrategia, Víctor Alvargonzález, en El Confidencial.

Fuente de la imagen: El Confidencial