Dónde invertir tus ahorros

Hay una pregunta que todo ahorrador se hace tarde o temprano: ¿en qué invertir los ahorros? Es normal y recomendable si tenemos en cuenta que tener el dinero parado hará que la inflación se coma parte de su valor. 

Sin embargo, antes de plantearse el dónde es importante tener claro el cuándo. Hay un refrán según el cuál el mejor momento para invertir fue ayer y el segundo mejor, hoy. Así es como se ilustra la ventaja competitiva de empezar pronto a invertir. 

Esto tampoco quiere decir que haya que lanzarse a invertir ya mismo. Antes de hacerlo es recomendable haber creado lo que se conoce como un colchón de emergencia. Es decir, un dinero que guardar en liquidez para hacer frente a imprevistos sin tener que desinvertir la cartera.

La razón es muy simple: así se evita tener que vender las inversiones en el peor momento del mercado porque se ha roto la lavadora o hay que arreglar el coche. ¿Y cuánto dinero separar? Entre tres y seis meses de gastos es la cantidad más recomendada.

Cómo y para qué invertir

Antes de decidir dónde invertir también es importante tener claros tus objetivos. En otras palabras, por qué y para qué inviertes. 

No es lo mismo invertir para comprarte una casa en cinco años que hacerlo para asegurar la universidad de los hijos o planificar tu jubilación. El plazo de la inversión en cada uno es diferente y eso afectará al riesgo que puedes asumir y a tu perfil como inversor.

Este perfil también tiene que incluir otras cuestiones como la actitud frente al riesgo, la situación económica o la experiencia en inversión. Incluso si inviertes con un asesor financiero independiente tus reacciones ante los movimientos del mercado serán diferentes si has invertido antes o no.  

Dónde invertir tus ahorros sin riesgo

Hay diferentes formas de invertir con distintos grados de seguridad. Lo que hay que tener claro es que en el mundo financiero la relación entre riesgo y rentabilidad es directamente proporcional. Cuando mayor es el riesgo, mayor deberá ser la rentabilidad potencial. Es así de simple. 

Por eso mismo las inversiones más seguras son las menos rentables. Esto es así tanto si inviertes 30.000 euros sin riesgo como si dispones de medio millón. 

Estas serían cuatro alternativas para invertir los ahorros de forma segura:

  • Depósitos y cuentas remuneradas, que rozan lo que podríamos considerar inversión para dejarlo puramente en ahorro. Un buen lugar para ese fondo de emergencia, pero poco más. 
  • Renta fija, una inversión que vuelve a ser más atractiva con la subida de tipo de interés y considerada una inversión segura siempre que se mantenga la emisión hasta el vencimiento. El gran riesgo de este producto de inversión es el coste de oportunidad si surgen nuevas emisiones que ofrecen un tipo superior. 
  • Fondos monetarios, que no son más que fondos de inversión en emisiones de renta fija a muy corto plazo. 
  • Una cartera de fondos conservadora. La opción menos segura en sentido estricto, pero también la única que mejorará la rentabilidad para perfiles conservadores y les permitirá superar la inflación. En resumen, asumir un riesgo controlado a cambio de una pizca más de rentabilidad. 

Víctor Alvargonzález descubre los secretos de esta cartera y por qué es el lugar adecuado para invertir con un perfil conservador. 

https://youtu.be/PEOtrQCM6CI 

Dónde invertir a corto y medio plazo

El plazo es importante en la inversión porque también está ligado al riesgo que puedes asumir. Y es que, el tiempo es el mayor aliado del pequeño inversor, le ayuda a hacer crecer sus ahorros y a mejorar la rentabilidad limitando el riesgo (riesgo entendido como volatilidad).

Para que lo entiendas mejor, si necesitas recuperar la inversión en dos años, el pilar de tu estrategia será conservar el capital. Por el contrario, si tu horizonte temporal es de más de diez años, puedes permitirte soportar los vaivenes del mercado porque tienes tiempo para enmendar las caídas.

Además, a largo plazo las posibilidades de sufrir pérdidas tienden a diluirse sin importar el activo en el que inviertas, como muestra este gráfico de JP Morgan. 

 

Con este concepto claro, la respuesta a dónde invertir a corto plazo será la misma que para un perfil conservador. Es decir, en productos seguros porque prima la preservación del patrimonio frente a la rentabilidad.

En inversiones a medio plazo, que son las que se realizan a más de dos años vista, ya es posible incluir un componente mayor de riesgo y, por lo tanto, de rentabilidad. Además, como muestra el gráfico anterior, la relación riesgo-rentabilidad será mejor.

¿Qué productos son adecuados para un inversor de medio plazo? Una cartera de fondos de inversión y ETFs es la opción más flexible y que mejor se adaptará a los diferentes perfiles de riesgo, desde el conservador hasta el más arriesgado.

Aquí también pueden aparecer determinados tipos de PIAS, aunque la mayoría están orientados al largo plazo.

Donde invertir a largo plazo

A largo plazo las opciones se multiplican y es posible incluir más renta variable en la cartera, siempre valorando el perfil de cada inversor. 

Entre las opciones para invertir a largo plazo figuran:

  • Fondos de inversión. La opción más flexible, mejor diversificada y con oferta para todos los gustos. Los fondos cuentan con la ventaja del diferimiento fiscal, que mejora la rentabilidad a largo plazo y permite aprovechar mejor el interés compuesto. En concreto, con un fondo no pagarás impuestos por el beneficio acumulado siempre que reinviertas el dinero en otro fondo. Esta es una enorme ventaja competitiva a la hora de hacer cambios en la composición de tu cartera de inversiones. 
  • Acciones de bolsa. Al invertir en fondos de renta variable ya estás invirtiendo en acciones de bolsa. Aun así, también se puede invertir directamente en acciones. La ventaja es que serás tú quien elija las empresas concretas. La desventaja es que necesitarás más capital para diversificar (por el precio de una acción puedes tener decenas con un fondo) y que las acciones no tienen la ventaja fiscal de los fondos. Además, gestionar una cartera de acciones requiere más conocimientos y esfuerzos.
  • ETFs. Los ETFs o fondos cotizados son un tipo de fondo de inversión que funciona como una acción a efectos prácticos. Esto quiere decir que se puede comprar y vender de forma inmediata en cualquier momento del día, pero también que tributa como una acción. En este artículo explicamos qué es un ETF y cómo aprovecharlos
  • Planes de pensiones. Los planes de pensiones son un producto de inversión para el largo plazo, ya que tendrás que esperar 10 años para recuperar el dinero salvo desgracia. Su ventaja competitiva es que permite desgravar en la declaración de la renta. A cambio, hay que tener cuidado al recuperar el plan de pensiones para que Hacienda no se quede con más de la mitad de tus ahorros. Esta falta de liquidez y las limitaciones en las cantidades que se puedan invertir lo han convertido en una inversión accesoria más que en el principal lugar donde invertir los ahorros. 
  • Invertir en dividendos. Los dividendos no son un producto en sí mismo, sino más bien un modelo y estrategia de inversión. Hablamos de construir una cartera de acciones o fondos que repartan dividendo y con los que constituir una renta periódica. Los dividendos son la parte de los beneficios que la empresa reparte entre sus accionistas y hay estrategias basadas en invertir en empresas que los reparten y aumentan cada año. El principal hándicap de esta estrategia es su fiscalidad, ya que los dividendos pagan impuestos, rompiendo así el diferimiento fiscal y la magia del interés compuesto

 

¿Qué opción es más adecuada? La realidad es que no hay una única respuesta. De hecho, es posible combinar opciones e, incluso, recomendable. Así es como se crea una cartera equilibrada que puede tener fondos de inversión para ciertos sectores y aprovechar la flexibilidad y costes reducidos de los ETFs para otros.

Invertir con un experto

¿Cómo se puede conseguir todo lo anterior? ¿En qué fondos concretos poner tus ahorros y en qué proporción? La última opción para invertir tus ahorros es hacerlo con un asesor financiero independiente que te ayude a:

  1. Dar con tu perfil de inversor real, el que de verdad se ajuste a tus objetivos. 
  2. Establecer la estrategia de inversión adecuada.
  3. Escoger los productos de inversión idóneos y, además, al coste más reducido (ahorrarás mucho en comisiones respecto a lo que conseguirás por tu cuenta)
  4. Gestionar la cartera para adaptarla a cada momento del mercado.

En resumen, una persona con la recorrer ese camino inversor acompañado y con la tranquilidad de saber que estás en manos expertas. Eso es precisamente lo que hacemos en Nextep Finance ¿Hablamos?